Es probable que con la cantidad de formas jurídicas que puede tomar una sociedad os preguntéis: ¿Qué tipo de estructura societaria me conviene más?
Hasta ahora hemos visto muchos tipos de sociedades. Cada uno de ellos con diferentes características y requisitos, pero queda una presunta importante por contestar, ¿cuál es la mejor estructura societaria para tu negocio?
Aspectos a tener en cuenta en la decisión de estructura societaria
Los puntos clave, como hemos visto en muchos de los artículos anteriores, son tres: el capital, los socios y la responsabilidad.
EL CAPITAL SOCIAL
Obviamente, para que un negocio funcione, necesitas una inversión inicial. Tienes que ponerlo en marcha, y los mínimos para hacerlo varían en cada tipo de sociedad. Las preguntas que tienes que hacerte ahora son: ¿De cuánto capital dispongo? ¿Quiero aportar una gran cantidad para este proyecto? ¿Cuánto dinero voy a aportar en comparación a mis socios?
Todas estas preguntas te ayudarán a determinar de cuánto capital dispones realmente, y en base a eso establecer tu criterio de selección de estructura societaria. Esto está directamente ligado a la responsabilidad que tendrás sobre el negocio, etc.
LOS SOCIOS
Otro factor muy relevante es el número de socios necesarios para constituir la sociedad. Existen tres categorías principales: 1 solo socio (unipersonal), 2 o más de dos socios. En este caso las preguntas que te debes hacer son más sencillas que las anteriores. ¿Cuántos socios somos? O, ¿Con cuántos socios me quiero juntar? ¿Quién va a administrar la empresa? En caso de querer a una sola persona al mando, la estructura societaria que buscas es la de administrador único.
Por otro lado, si quieres que haya más de un capitán del barco, buscas un administrador mancomunado o un administrador solidario. De esta forma, el administrador no será el único capaz de tomar decisiones.
LA RESPONSABILIDAD
En el caso de la responsabilidad, también es importante hacer un análisis del tipo de empresa que queremos montar, y de la responsabilidad que queremos tener para con la misma.
En primer lugar, ¿quieres ser responsable personalmente de las pérdidas de la empresa? ¿Cuánto riesgo quieres soportar? En base a estas respuestas, decide la cantidad de capital que quieres aportar a la empresa, y la que deben aportar el resto de socios, para que la distribución de poder sea tal y como quieres.
La estructura societaria de tu empresa va a determinar el poder de los diferentes socios, quién va a tomar las decisiones, y cómo se va a estructurar la empresa internamente. Ten en cuenta todos estos factores y estudia bien que tipo de estructura es más conveniente para tu situación actual.
Trabajar por cuenta propia y empezar una empresa no es fácil, por lo que si estás dando tus primeros pasos, contar con la ayuda de un asesor puede serte de gran ayuda. Deja que te ayudemos a establecer tu negocio y llevarlo a lo más alto de la mano de profesionales.
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