Volviendo a la rama contable de nuestro Diccionario Finutive os traemos para el día de hoy una entrada bastante novedosa. Para las personas que no son expertas en la contabilidad, este mundo se puede hacer arduo, tedioso y complicado. Esto normalmente termina desembocando en errores contables que cometemos. Los mismos pueden suponernos serios problemas en el futuro y que deberíamos evitar a toda costa. Pues de una contabilidad sana dependerá la supervivencia de nuestra empresa. ¿Quieres saber cuáles son esos errores más comunes? En caso afirmativo, sigue leyendo para no perderte ni un solo detalle.
Así que sin más dilaciones, vamos a pasar a ver los errores más comunes que se suelen cometer.
Confundir trabajadores con contratistas
Es un error frecuente y que no debemos cometer. Los contratos laborales son totalmente diferentes de los mercantiles al igual que las obligaciones que generan. Así que tengamos esto en cuenta.
Falta de asignación de presupuestos
Cuando no asignamos un presupuesto claro y determinado a un proyecto, es fácil perder el rumbo y acabar gastando más de lo que queríamos. Al igual que de cometer errores y omitir la contabilidad de algunas transacciones.
Anticiparse a los hechos
Es común que anotemos una ganancia prevista como un ingreso ya formalizado. Esto es un problema porque distorsiona la imagen real de nuestro negocio. Dicho movimiento hace que parezca más saludable de lo que realmente es. Lo que puede resultar en desajustes de las cuentas generales.
Gestionar manualmente la contabilidad de nuestra empresa
A día de hoy hacer esto es un gran error, pues perdemos mucho tiempo que podríamos ocupar en otras cosas más productivas. Además de que existe un riesgo muy superior de cometer errores. Esto se solventa fácilmente con el uso de cualquier programa informático de contabilidad, que nos hará la tarea mucho más fácil.
No externalizar la contabilidad
En relación a lo que acabamos de decir, aparte de que puedes usar un programa informático también tienes esta otra opción. A veces queremos hacerlo todo por nosotros mismos por el ahorro de costes. Sin darnos cuenta que si externalizamos las actividades que más nos cuestan, ganaremos mucho tiempo. Este lo podremos usar para maximizar la productividad con las tareas que mejor sabemos desempeñar.
No asegurar nuestra información
A día de hoy la mayor parte de la información de nuestra empresa seguro que está en formato digital. Si no realizamos alguna copia de seguridad periódica de esta información, es muy probable que la perdamos a causa de algún error o ataque. Esto nos supondría grandes quebraderos de cabeza innecesarios.
Mezcla de cuentas bancarias
Es algo común y totalmente innecesario el hecho de mezclar nuestra cuenta bancaria personal y la empresarial. Tenemos que evitar mezclar este tipo de cobros y pagos, pues nos dificultará mucho la tarea contable.
Tirar algunos recibos
Es frecuente que no guardemos algunos recibos de cosas que tienen una escasa cuantía, tanto de gastos que realizamos como de ingresos que obtenemos. Podemos pensar que por esos pocos euros o incluso céntimos no pasa nada. Pero si los sumamos todos juntos a lo largo de un ejercicio económico, llegan a resultar en una cantidad importante. Es esta cantidad la que nos producirá problemas y descuadres a nivel contable.
Si te has sentido identificado con algunos de los ejemplos citados, deberías tomar cartas en el asunto y resolver esos problemillas. Si no tienes claro qué es lo que más te conviene y los pasos que tienes que dar, contar con una asesoría laboral puede ser la solución ideal. Desde Finutive damos este completo servicio de asesoría a un precio inmejorable, disponiendo de la mejor herramienta para tus finanzas, flujo de caja y bancos.
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