El pasivo conforma el conjunto obligaciones y deudas en forma de recursos obtenidos por la empresa para financiar su activo y el ejercicio de su actividad. Dichas obligaciones o deudas son propiedad de terceras personas ajenas a la empresa. Por el contrario, el patrimonio neto financia el activo desde la aportación de socios o inversiones por parte de la propia empresa. Algunos elementos del pasivo son las deudas con entidades bancarias, cuentas a pagar a proveedores, etc. Dentro del pasivo debemos diferenciar el corto y a largo plazo, ya sea la deuda exigible a menos o más de un año.